La identificación con su mente hace que el pensamiento se vuelva compulsivo. Este ruido mental incesante nos impide encontrar ese reino de quietud interior que es inseparable del Ser. También crea un falso ser hecho por la mente que arroja una sombra de temor y de sufrimiento.
La voz comenta, especula, juzga, compara, se queja, acepta, rechaza y así sucesivamente. La voz no es necesariamente relevante para la situación en la que usted se encuentra en este momento.
Convierta en un hábito preguntarse a sí mismo: qué pasa dentro de mí en este momento? Esta pregunta lo orientará en la dirección correcta. Pero no analice, simplemente observe. Enfoque su atención en el interior. Sienta la energía de la emoción.
La mayor parte del sufrimiento humano es innecesario. Es creado por uno mismo mientras la mente no observada maneje nuestra vida. El dolor que usted crea ahora es siempre una forma de no aceptación, una forma de resistencia inconsciente a lo que es.
Debemos permitir ser al momento presente. Esto le permitirá probar el estado de libertad interior de las condiciones externas, el estado de la verdadera paz interior. Entonces vea que ocurre y actúe si es necesario o posible. Acepte, después actúe.
El poder del Ahora - Eckhart Tolle